Castillos de Palencia
Palencia. Historia

La orígenes históricos de la ciudad son inciertos, aunque existen vestigios arqueológicos que demuestran la presencia de asentamientos humanos desde la Edad del Bronce. Mucho más numerosos son los restos de origen celtíbero, puesto que los vacceos se asentaron en su solar. Tras la ocupación romana se la conoce como "Pallantia", igual nombre que tenía la capital vaccea, la actual Palenzuela. Plinio el Viejo la cita como una de las ciudades más importantes de la meseta norte.

Catedral

Con la decadencia del Imperio Romano y tras las invasiones de Suevos y Vándalos en el siglo V, pasa a formar parte del reino hispano-visigodo. Establecida como sede episcopal, vive una época de esplendor en la que destacan los obispos Arderico y Conancio.

Al inicio del siglo VIII la invasión musulmana y las plagas despueblan la provincia. No será hasta finales del siglo X cuando se vuelva a poblar la ciudad, que es saqueada en el 1000 por Almanzor. Finalmente es reconstruida por Sancho III el Mayor, quien restaura la sede episcopal y otorga en 1035 el señorío de la ciudad al obispo Bermudo.

Durante el reinado de Alfonso VIII el obispo Raimundo II concede nuevos fueros al concejo de Palencia el 23 de agosto de 1181. Más tarde, el obispo Tello Téllez de Meneses funda en 1212 los "Estudios Generales", considerados la primera Universidad de España.

Los siglos XIII y XIV es sede de Cortes Generales y concilios. Durante la minoría de edad de Alfonso XI el apoyo mostrado por la ciudad a la regente, doña María de Molina, le supondrá varios privilegios.

En 1387 las tropas del pretendiente a la corona de Castilla, el Duque de Lancaster, atacan la ciudad, lo que ante la ausencia de la mayoría de la población masculina que se encontraba en campañas militares, obliga a las mujeres palentinas a su defensa, lo que consiguen y que las valió el reconocimiento de Juan I y el "derecho de tocas" que ha dado origen a la banda dorada que luce en el traje tradicional palentino. Al año siguiente tuvo lugar en la catedral la boda del Príncipe Enrique III con Catalina de Lancaster.

Con motivo de las querellas entre el corregidor nombrado por Enrique IV y el Concejo, e instigados por don Sancho de Castilla, proclaman en 1465 rey en esta ciudad al infante Don Alfonso. Tras el nombramiento, amotinó a los vecinos que atacaron y derribaron el palacio episcopal del obispo don Gutierre, partidario del depuesto rey.

Puente Mayor

Durante la guerra de las comunidades, la ciudad, situada entre la realista Burgos y la comunera Valladolid, trata de mantenerse neutral aunque finalmente acaba sumándose a la sublevación comunera. Tras la batalla de Villalar huyen los representantes palentinos de la Santa Junta volviendo la población a la obediencia real.

En agosto de 1522 el Emperador Carlos V visita la ciudad. Durante 20 días imparte justicia e impone penas a los rebeldes. Vuelve a la capital palentina en 1527 y 1534 tras abandonar la Corte instalada en Valladolid debido a la peste que asola la vecina ciudad. Son los últimos momentos de esplendor de la ciudad que va perdiendo importancia frente a la vecina Valladolid.

La Guerra de la Independencia, al iniciarse el siglo XIX, supuso la ocupación de la ciudad por tropas francesas. También en este siglo tuvo lugar la construcción del Canal de Castilla, lo que supuso un importante beneficio para la localidad.