Gracias a la documentación existente en el Archivo General de Simancas de un pleito de 1484 entre el vecino de Abastas Diego Osorio, por un lado, y Gabriel de Peñalosa, por otro, tenemos la noticia de que este último había comenzado a edificar una fortificación o casa fuerte en la localidad desde cuatro años antes, cuyo derribo solicita el demandante. El Consejo falla que debe oír a ambas partes a pesar de que los testigos presentados por el demandado son impugnados por Diego Osorio.
Gabriel de Peñalosa era vecino de la localidad de Abastillas y tenía otra fortificación en el cercano lugar de Villalcón, mientras que su hijo Fernando de Peñalosa levanta poco después una casa fuerte en la vecina localidad de Añoza.
Doña Urraca en el año 1046 dona al monasterio de Sahagún varias heredades que tiene en los lugares de "Avarta" y "Anebza", antiguos nombres de las localidades de Abasta y Añoza. Posteriores donaciones en 1068 y 1074 también mencionan la población.
Con el nombre de "Bastos de yuso" aparece en 1351 incluida en el obispado de León. Es behetría de Juan Rodríguez, hijo de Pedro Ruiz Sarmiento, y tiene por señores naturales a los Lara, Vizcaya, Girones, Tello, Sarmiento, Guzmán y Manzanedo, a quien dan seis maravedís anuales por San Juan. Pagan por martiniega 225 maravedís de los que el señor se lleva la cuarta parte, 18 maravedís el adelantado y el resto corresponde al rey, a quien también pagan servicios y monedas, aunque no fonsadera ni yantar.
La localidad figura en 1828 con 73 vecinos pecheros, y aunque en 1589 tiene 40 vecinos y dos iglesias según los datos eclesiásticos, el censo de 1591 indica un vecindario de 88 vecinos, de los que 86 son pecheros y 2 pertenecen al clero secular.
Cuarenta años más tarde el vecindario ha disminuido hasta los 45 vecinos, que es como se consideran los 171 habitantes que tiene, de los que 132 son mayores de 10 años. Carece de ganado mayor y cuenta con 362 de ganado menor. El consumo anual de sal asciende a 20 fanegas.
Los datos recogidos a mediados del siglo XVIII indican que la villa es de realengo, cuenta con 58 vecinos de todas las clases y el casco urbano lo forman 57 casas habitables y el solar de una arruinada. Al ser las viviendas en propiedad no pagan foro ni otro tributo por ellas. Entre las casas se incluye la panera del montepío que guarda 80 cargas de trigo para socorro de los vecinos.
Como propios de la localidad dispone de 210 cuartas de tierra y otras 76 de viña, una casa que arrienda, un lagar, una fragua, un tejar y un corral.
Hay en la localidad tabernero, cirujano, maestro de niños, herrero, zapatero de viejo, sastre, 23 labradores a los que ayudan 5 hijos, 5 criados, 21 jornaleros, 6 pastores de ganado lanar, varios guardas de ganado lanar, mayor y del campo, dos curas, dos beneficiados y un sacristán que asiste a las dos iglesias. También se indica la existencia de 6 pobres de solemnidad que se mantienen de la limosna de los vecinos y que se recogen en la casa que tiene la Cofradía de los Mártires.
El lugar de Abastas en 1768 pertenece a la provincia de Toro, corregimiento de Carrión y obispado de León. Con una población de 217 personas, dispone de dos parroquias, la de San Salvador con 63 feligreses y la de Santiago con 154. Tiene 3 cofradías en 1771 que celebran 5 funciones o fiestas anuales por importe de 420 reales de vellón.
Figura en 1787 como villa con 232 habitantes de los que 129 son varones y 103 mujeres. Por el trabajo que desempeñan hay 50 labradores, 43 jornaleros, 2 curas, 2 sacristanes y un beneficiado, además de un hidalgo.
En 1828 ya aparece incluida en la provincia de Palencia, partido de Carrión, con 38 vecinos, 145 habitantes. Pertenece al partido judicial de Frechilla en 1850, con 180 almas que equivalen a 48 vecinos, un casco urbano formado por 51 casas en su mayoría de un solo piso, casa municipal y escuela de primeras letras.
Incorpora el territorio del extinguido término municipal de la vecina Abastillas en el año 1857. Cuenta el municipio con 337 habitantes en 1874, con 67 casas en Abastas y 20 en Abastillas.
Debido al estado ruinoso de la iglesia de San Salvador situada en el barrio de Abajo se cierra en 1855, cuyos restos se desploman entre 1892 y 1893. Al año siguiente para la reedificación ampliación de la ermita de Mediavilla se aprovechan materiales de la antigua iglesia, entre ellos las puertas que habían sido realizadas en 1759.
A pesar de no existir nada más que una iglesia, el obispado de León en 1882 las sigue considerando por separado e indica que a la de Santiago atiende a 207 almas y 80 la desaparecida de El Salvador.
En 1973 desaparece el municipio de Abastas al fusionarse junto con los de Añoza, Villalumbroso y Villatoquite para formar el de Valle del Retortillo.
La iglesia parroquial de Santiago situada en la parte alta de la localidad corresponde a un edificio de ladrillo del siglo XVII. La ermita de Medianilla, en la parte baja, junto a la carretera, es de finales del XIX.