Castillos de Palencia
Introducción
Monte Cildá

Antes de la llegada de los romanos la actual provincia de Palencia estaba poblada en su zona norte por los Cántabros, que se hicieron fuertes en los castros de Monte Bernorio y Monte Cildá. La zona central y sur de la provincia la ocupaban los vacceos, que opusieron seria resistencia en la ciudad de Pallantia, la actual Palenzuela.

Tras las invasiones de suevos, vándalos y alanos, en el siglo V y la caída del imperio romano en el año 474, ocupan la provincia los visigodos. Tras la ocupación musulmana de la península y la toma de la peña Amaya por Tarik en el 711, coincidiendo con una época de epidemias y hambre, el rey Alfonso I emprende una política de desertización en la que se abandona las poblaciones de los antiguos Campos Góticos, refugiándose en la montaña.

Guardo

Al iniciarse el siglo IX, Alfonso III inicia el proceso de repoblación. Las fortificaciones de Tremaya, Mudá y Piedras Negras, le permiten establecer una cabecera en Cervera de Pisuerga. Continúa después por la comarca de la Peña, bajo el control de San Román de Entrepeñas, por la vía que, bordeando la montaña, llega hasta el cruce con el río Carrión, lugar donde se establece la localidad de Guardo.

Aguilar de Campoo

En el año 824 el conde Munio Pérez otorga el lugar de Brañosera para poblarlo. Más al sur se establece una nueva fortificación en Aguilar de Campoo que se convierte en cabecera de la comarca.

La población de la Peña Amaya en el 860 por el conde Rodrigo, sirve de estímulo para la adentrarse en la comarca de la Ojeda protegidos por los castillos de Perazancas, Ebur en Vega de Bur, Buenavista de Valdavia, y Abia de las Torres. Siguiendo el río Carrión se repuebla Saldaña y más adelante Carrión de los Condes, que sirve de base para los asentamientos de Cisneros y Villada, mientras que en la orilla derecha del Pisuerga aparecen Frómista y Osorno.

Monzón de Campos

Castrojeriz sirve de protección para la repoblación de Astudillo y Santoyo, lo que facilita, a su vez, los asentamientos en Monzón de Campos, Frechilla y quizás Torremormojón. La protección de la fortaleza de Dueñas, apoyada por las de Magaz, Tariego y Cevico de la Torre, propició la población de los antiguos Campos Góticos, mientras que la zona oriental de la comarca del Cerrato se vio favorecida por las fortificaciones de Palenzuela, Baltanás, Castrillo de Don Juan y Castrillo de Onielo. Palencia capital se pobló a finales del siglo X.

El final de la repoblación
Astudillo

Desde que en el año 940 el conde de Castilla, Fernán González, intente traspasar la margen derecha del río Pisuerga y extender sus dominios hasta el Cea, transcurren dos siglos en los que castellanos y leoneses se disputan esta franja de terreno. La creación del condado de Monzón por parte del rey Ramiro II, detiene momentáneamente la expansión de Fernán González, quien en el 950 aprovecha la muerte del monarca para ocupa una franja paralela al Pisuerga en la que se encuentran poblaciones como Aguilar, Herrera, Osorno, Frómista, Astudillo, Torquemada y Palenzuela.

Támara

En 1037 tiene lugar la batalla de Tamarón (Támara), en la que se enfrentan Bermudo III de León, que muere en la contienda, con el rey de Castilla Fernando I, produciéndose la unificación de ambos reinos.

Tras su fallecimiento deja en herencia el reino de Castilla a su primogénito Sancho II, mientras que León es para su segundo hijo Alfonso VI, que enfrentado a su hermano mayor es derrotado en las batallas de Llantada (1068) y Golpejera (1072), siendo desterrado a Toledo. Con la muerte de su hermano ese mismo año recupera el legado paterno.

Tariego

Después de la nueva separación en 1157 de los reinos de Castilla y León por parte de Alfonso VII, vuelve un período de inquietud durante la minoría de edad de Enrique I, en la que su tutor, el Conde de Lara, sitia el castillo de Autillo de Campos y tras el fallecimiento del rey niño en 1217, oculta su cadáver en la fortaleza de Tariego. El nuevo monarca castellano, Fernando III, tuvo varios enfrentamientos con los Lara en sus primeros años de reinado. En 1230, tras el fallecimiento de su padre, el rey de León, hereda dicho reino uniendo definitivamente ambas coronas.

Ampudia

A finales del siglo XIII, durante la minoría de edad de Fernando IV, la provincia fue escenario de la lucha por el trono que mantuvo con el infante rebelde don Juan, que se hizo fuerte en Palenzuela y Paredes, mientras que sus tropas se adueñaron de Astudillo, Becerril de Campos, Monzón, Ampudia, Tariego y Dueñas, en tanto que el rey tenía el apoyo de la capital.

La provincia también se vio envuelta en el enfrentamiento fratricida entre Pedro I y Enrique II, a mediados del siglo XIV. Este último contaba con la fortaleza de Palenzuela y el apoyo de varias localidades, entre ellas Palencia capital.

Palenzuela

Durante los reinados de Juan II y Enrique IV algunas localidades fueron importantes focos de agitación a favor de los intereses políticos y económicos de los señores. Así el conde de Castro se rebela en Osorno en 1429; los Manrique en Amusco en 1437; Palenzuela en 1444 fue cercada por Alvaro de Luna; en 1465 la propia Palencia se amotina contra su obispo y en 1472 el conde de Benavente toma Carrión de los Condes.

El levantamiento comunero
Fuentes de Valdepero

En 1520 tiene lugar el levantamiento comunero, favorablemente acogido por gran número de localidades de la provincia, mientras que la capital, a pesar de que el populacho había derribado la fortaleza que el obispo poseía en Villamuriel, mantiene durante meses una postura ambigua hasta que a finales de 1520, con la llegada del Obispo Acuña, se decanta por el lado comunero. En el mes siguiente, el ejército del obispo de Zamora saqueó Fuentes de Valdepero y recorrió las localidades de Castromocho, Becerril de Campos, Paredes, Carrión, Villalcázar de Sirga, Frómista, Piña, Amusco, Támara y Astudillo.

Torremormojón

A mediados de enero la fortaleza de Ampudia es tomada por los imperiales, huyendo su guarnición al vecino Torremormojón al ser recuperada poco después por el ejército comunero. Acuña tomó más tarde Monzón, arrasó la fortaleza de Tariego y saqueó Magaz aunque no pudo tomar su castillo.

En el mes de abril, días antes de la batalla de Villalar, el paso del poderoso ejército del Condestable de Castilla por diversas localidades de la provincia en su avance hacia Medina de Rioseco, convence a muchos pueblos sobre la suerte de la contienda, apresurándose a pedir perdón y suministrar víveres para el ejército.

S. Miguel - Palencia

A finales de agosto de 1527, debido al peligro de la peste que amenazaba Valladolid, el Emperador Carlos V y su Corte se trasladan a Palencia en donde reside durante poco más de un mes. Se vuelve a repetir la situación en 1534, siendo los últimos momentos de esplendor de la ciudad que va perdiendo importancia frente a la vecina Valladolid.

Al inicio del siglo XVIII tiene lugar en varias ocasiones la ocupación por tropas francesas de la capital y diversas localidades de la provincia. El ejército invasor es combatido por partidas guerrilleras que asaltan los convoyes de suministro que transitan por el camino Real que comunica Valladolid con Burgos.

Los últimos acontecimientos bélicos en la provincia tuvieron lugar durante la Guerra Civil, entre 1936 y 1939, en el Norte de la provincia, donde se volvieron a utilizar emplazamientos como la cumbre de Monte Bernorio.

Villanueva de la Torre

Desde esta página les invitamos a conocer las fortificaciones situadas en la provincia de Palencia, comprendiendo castillos, torres, murallas, palacios, iglesias y casas fuertes, con su descripción y una breve reseña historica. Desgraciadamente, el estado de conservación de muchas de estas construcciones deja bastante que desear, no siendo pocas las que han desaparecido completamente. Aún así, quedan ejemplos dignos de visitar, entre los que destacan los del apartado de «Recomendados».